Benfica - FC Barcelona: Héroes en el infierno (0-1)

Esfuerzo catedralicio del FC Barcelona en Benfica. Los de Hansi Flick han dado el primer paso en la eliminatoria de octavos de final con una victoria de trabajo colosal (0-1). Porque cuando el encuentro estaba 0-0, Cubarsí ha sido expulsado en el minuto 22. Pero Raphinha, acompañado de Szczęsny y Pedri, ha vuelto a ser primordial para congelar el infierno rojo y apuntarse el único gol del partido.

No ha sido fácil. Porque como las calles de Lisboa, Da Luz ha empezado haciendo subido. En menos de un minuto, el Benfica se ha plantado dos veces en el área de Szczęsny. En la primera, el guardameta polaco ha sido salvador y en la segunda, la falta de efectividad se ha alineado con el Barça. Pero Cubarsí, ⁠Balde, I. Martinez, Pedri, ⁠Lewandowski, Raphinha, Lamine Yamal, ⁠Olmo, F. De Jong y Kounde han remontado esta pendiente y han dejado atrás la salida sinuosa del elenco del águila.

Con el miedo del infierno lisboeta dejado a un lado, los de Flick han monopolizado la posesión para empezar a soñar con el gol. Porque de las botas de Lamine Yamal y Pedri todo resulta posible. El centrocampista ha cogido temperatura para llevar el compás de estos octavos de final de la Champions y llevar a los barcelonistas hacia la vía de las ocasiones. Y en un cerrar y abrir de ojos, han sido tres, surgidas de las botas de Lewandowski y Lamine Yamal desde el interior del área.

Se nubla el control culer

La superposición de paradas de Trubin ha dado alas para que el conjunto rojo retomara su actividad sobre la portería de un providencial Szczęsny. Seguro en un lanzamiento de falta originado por una entrada de Pau Cubarsí, que ha sido expulsado, en el minuto 22, por ser el último hombre y cortar la carrera de Pavlidis. De nuevo, el camino del FC Barcelona ha vuelto a hacer subida.

Pero ni el infierno rojo creado en la grada ha encogido a los culers. La actitud defensiva de cada una de las piezas no ha escondido la voluntad de atacar. El Benfica ha sacudido las estadísticas ofensivas, pero el Barça, también a través de contragolpes que han hecho temblar la fortaleza local. Por momentos no se ha notado que los azulgranas estaban con uno menos. Tanto ha sido así que Raphinha, solo ante el portero, ha querido ser generoso y no ha rota el 0-0 de la primera parte.

Szczesny, salvador...

Mucho sufrimiento. Si Lisboa ha estado rodeada de muchos personajes históricos, en esta noche europea se le han añadido Wojciech Szczesny y Raphael Dias Belloli. Pero vayamos por partes. El guardián de la portería barcelonista ha vuelto a ser primordial para negar la celebración roja. Congelada por la parada magistral del polaco, que ha sostenido la pose defensiva de los azulgranas. Concentrados en sacar agua del barco y en sacar rendimiento de las rápidas transiciones, cuando el control de un sensacional 8 no ha imperado en el medular.

... Raphinha, monumental

Una vez más, el Barça de Hansi Flick ha demostrado que tiene la intensidad y la presión por bandera. Creyendo en cada balón como si fuera el último, ha llegado un gol que el público de Da Luz poco esperaba. Y lo ha hecho de las botas de una pesadilla recurrente. Raphinha ha vuelto a ponerse la capa de superhéroe para dejar helado el infierno rojo. Error en la construcción de la jugada del elenco de Bruno Lage y recuperación majestuosa de uno de los capitanes de la plantilla para telegrafiar un disparo lejano lleno de potencia y energía en el fondo de la red. Imparable para mantener el idilio en la portería lisboeta.

Era apena el minuto 61, y todavía quedaba mucha tela por cortar. El 0-1 nada ha cambiado. El conjunto de las águilas ha planeado a la caza del empate ante un 25 que ha mostrado una seguridad continuada ante la desesperación de los 62.437 espectadores y espectadoras. Asistentes a una clase magistral de Pedri, MVP del encuentro, en medio del campo y de una entrega altamente defensiva del FC Barcelona. Afortunado por el fuera de juego, que ha anulado un posible penalti a favor del Benfica.

Nadie dijo que sería fácil. Porque los de Hansi Flick han tenido que sufrir hasta el final con los constantes ataques portugueses. Pero en un auténtico ejercicio de resistencia y con un gigantesco Tek, que ha redondeado su estelar partido con un nueva intervención, el 0-1 ha sido el resultado que ha cerrado el primer capítulo. El miércoles 5 de marzo, el segundo en el Estadi Olímpic Lluís Companys. De momento, el FC Barcelona ha dado un paso adelante en esta eliminatoria de octavos de final. Exhibiendo carácter y orgullo, los azulgranas han sobrevivido y apagado el infierno rojo.