Gerard Piqué, 600 partidos como jugador del FC Barcelona
Gerard Piqué sigue batiendo récords con el FC Barcelona. Tras superar a Carles Puyol como cuarto jugador con más partidos oficiales con la camiseta azulgrana, este domingo, en la victoria contra Osasuna en el Camp Nou, el central catalán ha llegado a los 600 partidos oficiales con el club culé. Una cifra histórica que sigue agrandando la leyenda de Piqué en el barrio de Les Corts.
A continuación, repasamos su amplia trayectoria recordando los títulos, estadísticas y momentos inolvidables que le han llevado a ser uno de los jugadores más recordados de la historia del club barcelonés.
Una vida de color azulgrana
Formado desde pequeño en los campos de La Masía, el carácter de Gerard Piqué es el de un competidor nato. Así, con 410 victorias y 116 empates, el '3' azulgrana sólo ha conocido la derrota en 73 ocasiones con el club culé.
Además, Piqué ha defendido la camiseta azulgrana en todas las competiciones posibles. Si repasamos todos los partidos que ha disputado hasta el momento desde su debut en 2008, el central culé ha disputado 387 partidos en la Liga, 122 en la Liga de Campeones, 65 en la Copa del Rey, 16 en la Supercopa de España, cinco en el Mundial de Clubs, dos en la Supercopa de Europa y tres en la Europa League.
Un sinfín de títulos...
De todos los partidos que ha jugado Gerard Piqué con el Barça, muchos de ellos han terminado con celebración triunfal. Y es que, durante estos años en el club culé, el central de la Bonanova ha vivido una etapa dorada que le ha llevado a ser uno de los jugadores más importantes de la última década culé.
Por tanto, con 30 títulos en 14 temporadas, su palmarés se desglosa con ocho Ligas, tres Champions League, siete Copas del Rey, seis Supercopas de España, tres Mundiales de Clubes y tres Supercopas de Europa. El central azulgrana es el tercer jugador de la historia que más trofeos ha llevado a las vitrinas del Museo del Camp Nou, sólo superado por Leo Messi (35), Andrés Iniesta (32) e igualado con su actual compañero de equipo, Sergio Busquets (30).
... y de redes
Una de las imágenes que siempre ha acompañado las celebraciones de estos títulos es el habitual ritual que lleva a cabo Gerard Piqué al finalizar el partido. Como recuerdo, siempre que el Barça logra ganar una final, el central catalán recorta parte de la red de la portería donde se ha disputado el encuentro para llevársela hacia Barcelona, junto con la copa y la medalla de campeón.
La última red que pudo llevarse a Piqué a casa fue la del estadio de La Cartuja, la temporada anterior en la final de la Copa del Rey contra el Bilbao (0-4). Un título de Copa especialmente emotivo para el central culé. El ‘3’ azulgrana, que fue una de las piezas claves de las remontadas completadas durante las eliminatorias de cuartos y semifinales, reapareció en el último encuentro de la competición después de una lesión de seis semanas. Sin embargo, fue titular, disputó los 90 minutos y sumó la treintena red a su particular colección.
Un central con el instinto de un delantero centro
“Siempre digo que si jugara de delantero, haría 15 goles, pero me han echado atrás y disfruto igualmente”. Estas fueron las declaraciones con las que Gerard Piqué dio por finalizada su estancia en el Diego Armando Maradona, tras anotar un gol importantísimo que certificó la clasificación de los culés para los octavos de final de la Europa League.
Y es que, pese a ser un excelente defensor tanto en campo abierto como en las proximidades del área, el instinto goleador de Piqué siempre ha sido uno de sus avales futbolísticos. En estos 600 partidos con el '3' azulgrana en la espalda, ha sumado un total de 53 goles. 16 de ellos han sido en la Liga de Campeones, una cifra que le ha llevado a ser el defensor más goleador de la competición empatado con Roberto Carlos.
Pero la faceta goleadora no sólo la ha adquirido en los últimos años, sino que es una característica que le ha acompañado a lo largo de toda su carrera. De hecho, uno de sus goles más recordados llegó precisamente en su estreno goleador en la Liga con el Barça. En el famosísimo 2-6 en el Bernabéu, Piqué cerró la goleada culé con una diana de absoluto killer que dejó una posterior celebración recordada por todo el barcelonismo.