Delantero que se formó en las categorías inferiores del Real Madrid, y que llegó al Barça procedente del Mallorca en 1999. Tenía un gran nivel, podía chutar con ambas piernas, e hizo una primera temporada muy notable, marcando goles decisivos. No obstante, en las temporadas posteriores tuvo algunos problemas físicos que afectaron su rendimiento. Se marchó al Zaragoza en el verano de 2003.

Dani Garcia llegó a Barcelona después de haber protagonizado una magnífica temporada en el Mallorca. Pocas semanas antes de presentarse con el Barça, había disputado la final de la antigua Recopa de Europa con el conjunto balear. El título acabó en manos de la Lazio, que ganó por 2 goles a 1, a pesar de que la diana de los mallorquines fue obra de Dani. Durante su primera temporada en Barcelona, ​​aunque no fue titular indiscutible, tuvo un papel destacado. Acabó disputando 44 partidos y marcó 16 goles; su segunda mejor anotación goleadora como profesional. Las tres temporadas siguientes, la 2000-2001, la 2001-2002 y la 2002-2003 prácticamente no disfrutó de minutos. Finalmente, el curso 2003-2004 se marchó cedido al Zaragoza, con quien acabaría ganando la Copa del Rey en el Estadi Olímpic Lluís Companys ante el Real Madrid. Al año siguiente ya se desvinculó definitivamente del Barça y firmó una temporada por el Espanyol. Después empezaría una aventura por Europa que lo llevaría primero a jugar con el Olympiacos griego durante dos años y medio y después con el Denizlispor turco, donde estuvo sólo seis meses. El delantero de Cerdanyola se acabó retirando en las filas del Rayo Majadahonda, en 2008.