Delantero muy potente técnica y físicamente, especialista en las recuperaciones de balón y que aportaba mucha seguridad. Llegó en el mercado de invierno de la mano de Rijkaard, y fue un auténtico revulsivo, ya que contribuyó decisivamente a la fortaleza del medio campo y en un cambio táctico del equipo. Era inconfundible porque jugaba con unas gafas bien visibles. Dejó el club al final de la temporada 2003-2004, la única en la que vistió de azulgrana.

En septiembre de 2003 empezaba la era Rijkaard y no fue fácil. Al equipo le costó arrancar a pesar de que la idea de fútbol que imprimía el técnico holandés era muy atractiva y vistosa. Como en todo proyecto que empieza había algo que faltaba, y eso la aportó Edgar Davids. Aterrizó a media temporada, en el mercado de invierno, procedente de la Juventus de Turín, entonces subcampeona de Europa. El rol que desarrolló el centro del campo fue clave para que el equipo comenzara a funcionar y protagonizar una escalada notable en la Liga. El título se acabaría escapando a manos del Valencia, pero la sensación es que, tal y como iba aquel Barça, si el campeonato hubiera durado un poco más habría podido atrapar y superar a los valencianos, que finalmente sumaron cinco puntos más que los azulgranas. A pesar de que la voluntad del jugador y del club era alargar la vinculación y seguir caminando juntos, no se pudo llegar a un acuerdo y Davids acabó fichando por el Inter de Milán. Tras pasar por el Tottenham, afrontó una segunda etapa en el Ajax, jugó en el Crystal Palace y se retiró a las filas del Barnet FC inglés en el año 2013.

Palmarés:

Campeón de Europa con el Ajax en 1995
Internacional con Holanda en 74 ocasiones