FC Barcelona Lassa - HC Vardar: Golpe de efecto contra el campeón (29-28)
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La Liga de Campeones de balonmano ha vuelto al Palau, y lo ha hecho de la mejor manera posible: con una victoria (29-28). Además, no una victoria cualquiera, sino que se trata de un triunfo contra el actual campeón de la competición y líder del grupo A, que hasta este sábado no había perdido ningún duelo. Así pues, los casi tres meses de espera han valido la pena, especialmente después de un segundo tiempo en el que se ha decidido un enfrentamiento de alto voltaje y muy igualado. Pero el aumento del ritmo defensivo, el buen juego de Viran Morros y las paradas de Gonzalo Pérez de Vargas han acabado siendo determinantes.
Fuerzas igualadas
La visita del líder no llegaba en un buen momento para el Barça, con varias bajas importantes (Andersson, Pálmarsson y Lenne) y jugadores tocados. A pesar de todo, los de Xavi Pascual se han repuesto de las adversidades y han plantado cara a un líder que ha tenido en el exazulgrana Sterbik a su mejor jugador. Especialmente en el primer periodo, cuando ha alcanzado un 40% de acierto en nueve paradas clave que han explicado el 15-14 al descanso.
El Barça ha comenzado bien (5-2, min 6), pero el Vardar ha podido darle la vuelta al marcador (10-11, min 23). En el peor momento azulgrana, sin embargo, ha aparecido la figura de Jallouz, con seis goles consecutivos, que ha hecho crecer a los locales para poder marcharse hacia los vestuarios con ventaja.
Dos puntos más en el saco
Aunque ha continuado deteniendo, Sterbik no ha podido seguir el ritmo en la reanudación, factor que, sumado al mayor desacierto visitante, el Barça ha aprovechado para abrir brecha. En este periodo dos jugadores azulgranas han sido importantes. El primero, un Gonzalo que ha hecho hasta cinco paradas en los primeros 16 minutos del segundo tiempo (22-19, min 46). El segundo, un Viran Morros que ha tirado de carácter. Sus cuatro goles, tres de ellos en ataque sin portero, han sido importantes (28-24, min 55).
La diferencia ya ha sido insalvable para los visitantes, que han podido reducir distancias pero no han evitado que el triunfo se quedara en el Palau en la undécima jornada de la fase de grupos y a falta de tres partidos para su finalización. Tras el triunfo, el objetivo es el mismo: ganar todo lo que queda para quedar lo más arriba posible.
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