Justin Anderson: "La energía del Palau puede ser abrumadora"

El Palau Blaugrana está a pocas horas de acoger el primer duelo de Euroliga del curso. El ALBA Berlin será el rival de este viernes (20.30 horas) en una cita en la que se intentará conseguir la primera victoria europea del curso. Y la afición, como ocurrió en el partido de Liga Endesa ante el Covirán Granada, tiene como aliciente ver en acción a los cinco jugadores nuevos de este curso.

Uno de ellos, Justin Anderson, se muestra muy ilusionado en este curso en una entrevista con Barça One. A continuación reproducimos las frases más destacadas de la entrevista:

La derrota de Kaunas

“Cada primer partido en casa de su rival es muy difícil. Todo el mundo está muy motivado y es muy difícil ganar fuera de casa”.

“Después de perder en Kaunas, creo que respondimos bien ante el Lleida, que era su primer partido de ACB en su pista después de 19 años. Y su afición fue increíble, tan ruidosa como la de Zalgiris”.

“Nosotros no dormimos después de estos partidos. Mucha gente no lo sabe. Nos cuesta dormir después de no ganar. Pero es necesaria la adversidad para poder crecer. Tienes que poder aprender para poder ser el mejor. El partido del Zalgiris no debe preocuparnos. Podemos aprender y corregir sus errores”.

“Para mí, lo más importante fue cómo respondimos a ese test. Ésta es la conclusión que saqué”.

Listo para volver al Palau

“Estamos preparados. Estamos entrenando bien. Creo que a los aficionados les va a gustar lo que verán el viernes”.

“Estamos entendiendo lo que quiere el entrenador en los partidos. El partido de Kaunas ya le hemos dejado atrás y ya tenemos ganas de volver a jugar en el Palau”.

“Debemos controlar lo que podemos controlar nosotros. Es muy importante. Es transmitir energía a la pelota de baloncesto y, si la movemos bien, habrá buena energía en el ambiente. Y si lo mezclas con los Dracs y la afición del Palau, habrá mucha energía y eso puede ser abrumador para los rivales”.

“En el Palau, en la pista donde jugamos, puedes oír la historia. La afición espera venir aquí y ver un buen partido. La afición siempre está a la altura y nos toca a nosotros estar también a la altura. Son dos cosas que van juntas”.

La dificultad de la Euroliga

“La Euroliga es especial porque se asemeja a la NBA. He tenido la suerte de jugar en la NBA y también en el baloncesto universitario. La Euroliga es muy intensa, en cada jugada hay mucha presión y requiere mucha estrategia. Los entrenadores son muy inteligentes, hacen mucho ajustes. Y acaba siendo tu voluntad contra la suya. Esto es cada noche, en la part alta y baja. No hay partidos fáciles en la Euroliga y creo que esto es lo que hace que sea una competición especial”.

“Cuando estás enamorado del baloncesto, cuando entrenas y te preparas durante el verano, vives para jugar partidos. No veo el calendario como algo negativo, tenemos la oportunidad de jugar tres partidos a la semana, de crecer y de prepararnos para el final de temporada. Es un privilegio, estamos bien entrenados y preparados”.

“Nosotros sabemos que ningún partido será fácil. Confío en que podamos ganar la Euroliga, por supuesto. Pero no me gusta mirar más adelante del próximo partido. Y ahora viene el ALBA de Berlín. Entiendo que el proceso es más importante. Así que no pienso mucho en el futuro. Nuestro trabajo durante la temporada nos permitirá poder responder a esa pregunta”.

La adaptación al equipo

“Me encuentro muy bien, la pasada temporada llegué tarde al Breogán (en noviembre) y después terminé en el Valencia. Me tiraron a los leones y tuve que espabilarme. Cuando llegas a media temporada, el equipo ya se conoce y tú eres el jugador nuevo, acabas jugando por ti mismo y por demostrar a los compañeros que eres un buen jugador. Pero cuando empiezas de cero a principio de temporada, lo único que importa es el equipo”.

“Aquí me siento mucho más como en casa. Me siento parte del equipo. Hicimos la pretemporada, fuimos a China, pude conocer a los compañeros y competimos en la Lliga Catalana. Me siento parte de un equipo. Y cuando salgo a por un café, la gente me saluda. Me encuentro muy bien en Barcelona. La manera de que esto siga así es teniendo éxitos. Y esto es lo que quiero. Juegas por algo mayor que tú”.

“Como familia, cada vez estamos más conectados. Y esto se nota. Estamos en una fase de conocimiento y eso no ocurre sólo el primer día. Ahora estamos en el segundo mes y hemos avanzado mucho respecto al punto de partida. Somos un grupo muy unido, pero no sólo a los americanos. Estamos conectando y descubriendo lo que necesitamos para aportar energía, esfuerzo y trabajo para el equipo”.

“Está siendo una experiencia agradable y me está yendo bien, pero todo será mejor al final de la temporada cuando logremos nuestro objetivo. Y esto es lo que tengo ganas de ver, la reacción de esa ciudad cuando ganamos. Lo único que hago es estar centrado en el día a día para conseguir este objetivo y veremos dónde estamos al final de la temporada”.

Anderson como jugador

“Puedo aportar energía, esfuerzo, trabajo para el equipo, físico, disparo, etc. Y lo más importante de todo, defender al mejor jugador rival. Un jugador como Scottie Pippen, el que quiere hacer el trabajo sucio. No tengo ninguna necesidad de ser el jugador. Necesitamos jugar todos uno por el otro. Y debo ser un ejemplo en esto, tanto si juego cero como 40 minutos. Quiero ayudar al equipo”.

“A mí me encanta competir. También celebro las acciones de mis compañeros. El baloncesto es un juego y debe ser divertido. Y quiero que siga siendo así. Cuando no me divierta no sé si seguiré jugando”.

El Barça como Club

“Sé que esto es el Barça. Y conozco al Barça desde pequeño. Y es un sitio donde hay muchas expectativas y mucha humildad. Veo cómo juega Lamine Yamal y todo el equipo de fútbol. He conocido a un jugador de balonmano y siento la humildad que tiene todo el mundo. Hay voluntad por ganar y también por trabajar. Siento que puedo formar parte de un sistema como éste”.