Real Betis – FC Barcelona: Apisonadora alegre y virtuosa (0-5)

No hay quien pare a este Barça. Los de Valverde han cosechado un espectacular triunfo ante el Betis en el Villamarín (0-5), con una nueva exhibición de Messi, con doblete y asistencia a Suárez, también bigoleador. Un triunfo que permite a los azulgranas distanciarse, aún más, de sus perseguidores tras los tropiezos de Atlético de Madrid y Valencia.

Batalla por el balón

La visita del Barça al Villamarín hacia prever un partido virtuoso. Y el duelo no ha defraudado a los amantes del futbol. El estilo propio del Barça se enfrentaba al sello de Quique Setién introducido en el Betis. Un equipo valiente, con jugadores peloteros en el medio del campo, atrevidos en la presión arriba y con la defensa tremendamente adelantada. Ante este planteamiento y con dos equipos que muestran su amor por el balón, la batalla se situaba en el medio del campo. Las ganas de coger el control del balón se veían desde el inicio, y eso se traducía con jugadas muy rápidas de lado a lado, pero sin profundidad. Mucho toque, pero robo inmediato. No era de extrañar, entonces, que la posesión se situaba en el 50-50 durante el primer tiempo.

El partido estaba bonito con un Barça que ha ido creciendo claramente con el pase de los minutos. El Betis se tenía que exigir en defensa y el Barça buscaba la espalda de la defensa bética a través del mago Messi y la velocidad de Jordi Alba en el carril izquierdo. Crecían los de Valverde y avisaban con peligro la portería de Adán con disparos de Sergi Roberto i Rakitic. El de Reus es un motor incansable, atento en las ayudas defensivas, rápido, virtuoso y eléctrico en el medio del campo. Una versión del 20 azulgrana simplemente espectacular. Antes del descanso, llegaría la nota negativa del Barça con la lesión de Vermaelen. El central belga no ha podido seguir una carrera de Sergio León y ha tenido que parar por una lesión en los isquiotibiales de la pierna izquierda.

Exhibición de Messi

El paso por los vestuarios ha hecho cambiar el guión del partido. Porque de jugar en un espacio de 30 metros en un duelo espectacular por el balón en el primer tiempo, se ha pasado a un control mucho más intenso del Barça que, paciente pero rápido, ha empezado a desordenar a los de Setién. Y ante eso los azulgranas han aprovechado para empezar a abrir el partido con un gran gol de Rakitic, precedido de un pase de Suárez espectacular que ha roto la defensa adelantada del Betis. No ha cambiado para nada el estilo local, fieles a su estilo han seguido con la misma idea de juego. Pero Messi ha sacado su repertorio habitual. Al argentino no se le termina nunca su magia y en cada partido saca un truco nuevo.

En la primera parte ha hecho de centrocampista adaptansode al contexto del partido, y en el segundo tiempo ha leído los espacios a la perfección y ha empezado a destrozar la zaga bética. No ha perdonado en el mano a mano ante Adán para hacer el segundo. Una jugada calcada a la de Villarreal con previo robo de Sergio en la creación del Betis en zona de tres cuartos. Ha participado en la jugada del tercero de Luis Suárez, que ha llegado a su centenario de goles en Liga con el FC Barcelona marcando y cerrando el triunfo con el quinto gol de la noche. Un zapatazo espectacular a la escuadra. Antes, Messi ha vuelto a dejar una obra de arte en el Villamarín, estadio donde cosechó el récord de goles en un año natural en 2012, después de engañar a toda la defensa bética con sus fintas y batir a Adán con un disparo sutil al palo izquierdo para hacer el cuarto.

Messi ha sido creador de juego, goleador y asistente, capaz incluso de sacar el balón desde atrás ante la presión de cuatro jugadores béticos de manera mágica. Un hecho que ha levantado los espectadores del Betis para rendirse al crack argentino. El Barça se va de sevilla con un gran triunfo que le permite distanciarse aún más en lo alto de la clasificación, después de los tropiezos de Atlético de Madrid y Valencia. Y es que el Barça es, actualmente, una apisonadora alegre y virtuosa.