La visión internacional del Espai Barça

El Espai Barça genera mucho interés y expectación a nivel global. La revista Wired explica todos los detalles de lo que será el nuevo espacio azulgrana a través de un artículo y un vídeo en colaboración con Audi en el que se repasan todos los cambios. Un espacio que se integrará en el barrio de las Cortes, con un estadio modernizado y con capacidad para aproximadamente 105.000 espectadores. También contará con un Nuevo Palau que reforzará la apuesta del Club para tener más espacio público y abrirse al vecindario a través de la eficiencia y la sostenibilidad medioambiental.

"El Estadio tiene 60 años y casi no se han hecho cambios desde el Mundial de 1982, necesitábamos actualizarlo", explica el directivo y comisionado del Espai Barça Jordi Moix. "El Estadio tiene cosas muy buenas que podemos aprovechar y decidimos que era más eficiente aprovechar el actual en lugar de hacer uno nuevo", añade.

Unos cambios en el Estadio y a su alrededor que estarán enfocados a optimizar la calidad de las instalaciones con el soterramiento del parking para mejorar el acceso de los aficionados o una primera grada más vertical para mejorar la visibilidad. Asimismo, también destaca la instalación de un techo para asegurar la protección de la lluvia para los aficionados.

El Camp Nou también tendrá un vista desde fuera que lo hará más cercano a la ciudad y los visitantes. Todas las novedades buscan abrir el espacio en la ciudad y ofrecer a los usuarios experiencias fuera del campo, como bien explica Jordi Moix: "La experiencia de venir al Camp Nou no implicaría sólo los 90 minutos del partido, sino que habrá servicios para atraer la afición en el Estadio una o dos horas antes para socializar el día de partido", explica el directivo y comisionado del Espai Barça.

La tecnología como una de las bases

Uno de los arquitectos del proyecto, Yoshiyuki Uchiyama, destaca también en el vídeo la importancia de la tecnología para conocer las bases del estadio actual, ya que cuando se construyó el Estadio en los años cincuenta el proceso de diseño era muy diferente: "no nos indicaba si los elementos eran muros o columnas y un humano debía introducir todos los elementos en nuestro sistema. Con la nueva tecnología BIM (modelado de información de construcción), ya se ha construido el edificio en el ordenador antes de empezar la obra", afirma el arquitecto del futuro Camp Nou.