¿Qué dicen los precedentes con el 0-0 de la ida jugada en el Camp Nou?

Una vez sí y dos no. Éste es el registro europeo del Barça en una eliminatoria a doble partido con la ida disputada en el Camp Nou y acabada sin goles. Un dato a tener en cuenta, puesto que es el mismo resultado logrado en el primer asalto del duelo de octavos de final de Europa League contra el Galatasaray. Ahora bien, los azulgranas tienen en cuenta que esta temporada las dianas fuera de casa ya no tienen valor doble.

Sólo tres precedentes europeos

Si miramos los libros de historia, encontramos que el Barça ha escrito tres 0-0 en el partido de ida en un cruce europeo abierto en el Camp Nou. Los tres precedentes contra equipos ingleses, dos en las semifinales de la máxima competición continental y uno en la Copa de la UEFA. Por tanto, el electrónico del capítulo inicial de los octavos de final contra el Galatasaray se convierte en la segunda vez que sucede en la Europa League o Copa de la UEFA.

El 5 de abril del 2001, en las semifinales de la Copa de la UEFA, los culés empataron 0-0 en la ida en el Camp Nou ante el Liverpool, en un partido en el que precisamente jugó un joven Xavi Hernández. Desgraciadamente, en la vuelta a Anfield, los azulgrana perdieron por 1-0 con un gol de penalti de McCallister, de una competición que acabaría ganando al Liverpool en la final por 5-4 ante el Alavés.

El 23 de abril de 2008 un 0-0 ante el Manchester United de Sir Alex Ferguson fue el primer paso de la eliminación culé de la Champions League. En el encuentro del Camp Nou, nada pudo evitar que el partido acabara sin goles, tampoco la presencia de Xavi Hernández, capitán, en la alineación titular. Posteriormente, en Old Trafford, se decidió el finalista del torneo de las estrellas, los Red Devils gracias a un solitario gol de Scholes.

En la temporada siguiente, Xavi centrocampista y el Barça firmaron el precedente alegre de esa mirada al pasado. Con el egarense también sobre el verde del Estadi, culés y blues fueron incapaces de deshacer el empate del comienzo. Stamford Bridge dictó sentencia en esas semifinales ante el Chelsea.

El 6 de mayo de 2009 fue una noche muy presente en el imaginario barcelonista. Una noche de euforia gracias al recordado gol de Andrés Iniesta en los instantes finales. Un disparo imparable con el exterior del pie derecho que se coló por la escuadra de Petr Čech y supuso el 1-1 final. Esa noche mágica, el valor doble de las dianas desató la locura azulgrana. Aumentada posteriormente con la consecución de la Champions en Roma.

En la actualidad, el jueves 17 de marzo en el Nef Stadyumu, el Barça tendrá la oportunidad de igualar la balanza de este balance registrado por el 0-0 de las idas jugadas en el Camp Nou.