Joan Laporta insta a cerrar una etapa para revertir la situación y devolver la alegría al barcelonismo

Joan Laporta quiso hablar sobre todo de futuro y mostrarse fuerte y optimista en el punto del orden del día correspondiente al informe del presidente, que sucedió a las aprobaciones de las cuentas firmados por la anterior Junta Directiva. Lo hizo, sin embargo, tras referirse a las imágenes del vídeo que repasó la temporada 2019/20 en el ámbito deportivo y especialmente institucional, "unos episodios que, remarcó el presidente," nunca deberían haber producido". Con la aprobación de la liquidación de la temporada 2019/20 y la aprobación del presupuesto 2020/21, Laporta da por cerrada "una etapa con demasiadas sombras, con demasiada amargura, con demasiado hechos que no nos han gustado", para abrir una nueva etapa en la que "invertir todos los esfuerzos necesarios para revertir la situación, y lo haremos porque somos el Barça".

 
El presidente apeló al compromiso propio, al de la Junta Directiva, ejecutivos y trabajadores de la Entidad para alcanzar este objetivo, así como el de los "miles de socios y aficionados" a "poner juntos las bases de los próximos años que, con esfuerzo y mucho trabajo, queremos que sean esplendorosos". Y añadió: "Somos el Barça y nunca nos rendimos. Hoy, más que nunca, tenemos que mirar al horizonte con las máximas dosis de optimismo y fortaleza".
 
Laporta volvió a agradecer a los socios la confianza depositada en las últimas elecciones del 7 de marzo, y según aseguró, "entendemos y aceptamos el ruido del entorno", pero que nada hará apartarse a la Junta Directiva de su camino hacia el propósito de que el Barça "vuelva a ser querido y admirado en todo, para que vuelva la alegría al barcelonismo y para que todos y todas volvemos a tocar la gloria y seguimos haciendo historia". 
 
El presidente promete "trabajo" y asegura que "tenemos un plan, nos disteis confianza para aplicarlo y la aplicaremos, con discreción y profesionalidad", huyendo, afirmó, de "falsas promesas que no podemos cumplir" y de "la lamentación continuada, y menos tomaremos ninguna decisión con espíritu de revancha". "No somos así. No nos han educado así. No entendemos el Barça así", añadió el presidente.

Trabajando con la premisa de que "el Barça es un sentimiento", Laporta y la Junta Directiva se han marcado el objetivo, además de recuperar la alegría, que "el Barça vuelva a ser un motor de optimismo y recupere el espíritu de trabajo, ilusión, empuje, solidaridad", que el Barça "vuelva a ser querido, admirado y respetado en todo", asumiendo el reto de "recuperar el peso que le corresponde al FC Barcelona como institución en el mundo del deporte". "Para lograrlo, el Club tendrá un liderazgo fuerte para defender siempre la Entidad por encima de todo. Este es mi compromiso. Un liderazgo fuerte que no es incompatible con las emociones y los sentimientos", añadió el presidente Laporta.

Por último, el presidente azulgrana hizo una declaración de compromiso para seguir siendo "un club multideportivo conocido y reconocido en todo el mundo, por nuestra historia, por nuestros logros, por nuestros jugadores y jugadoras y también por lo que representamos, y queremos continuar siéndolo".