Bodas de Oro del FC Barcelona femenino

La génesis del fútbol femenino del FC Barcelona se remonta al día de Navidad de 1970, hace 50 años. Ese día, un grupo de pioneras y valientes mujeres que querían jugar al fútbol cumplieron el sueño de jugar en el Camp Nou. No pudieron hacerlo con la camiseta azulgrana, como hubiera sido su deseo, pero aquel partido se ha convertido con el paso del tiempo con el símbolo de una lucha de perseverancia para conseguir el reconocimiento que hoy en día tiene el Barça Femenino, uno de los seis equipos profesionales del club, que cada día gana más aficionados y despierta mayor interés mediático.

El once que jugó en el Estadio la Navidad del 1970 fue bautizado para la ocasión con el aséptico nombre de Selección Ciudad de Barcelona y llevaba camiseta blanca, pantalón azul y medias azulgrana. Su entrenador era el mítico portero Antonio Ramallets, todo una leyenda del Club, y el rival era la Unión Deportiva Centelles. En las gradas había unos 60.000 espectadores, ya que el debut de aquellas valientes mujeres que tuvo lugar la mañana del 25 de diciembre en el Camp Nou formaba parte de un festival benéfico organizado por Radio Nacional para recaudar fondos para los hospitales infantiles y que contaba como plato fuerte un partido internacional amistoso del primer equipo del Barça con el CSKA de Sofía.

Pero, ¿cómo se llegó a ese momento que ahora forma parte de la historia del Barça?

Todo comenzó en otoño de ese año gracias a Immaculada Cabecerán, una joven aficionada culé de 18 años que quería practicar de manera seria un deporte que entonces todavía estaba vedado a las mujeres. Decidida a cumplir su objetivo, una mañana de noviembre de 1970 se reunió con el presidente azulgrana Agustí Montal en la sede institucional del Club, situada en la vieja Masía del Camp Nou. Ese día, Inmaculada le confesó al mandatario barcelonista que estaba convencida de que había muchas chicas que quieren jugar al fútbol. Montal contestó que que si el Imma encontraba suficientes mujeres para formar este equipo, el Barça le apoyaría.

La génesis del fútbol femenino del FC Barcelona se remonta al día de Navidad de 1970, hace 50 años. Ese día, un grupo de pioneras y valientes mujeres que querían jugar al fútbol cumplieron el sueño de jugar en el Camp Nou. No pudieron hacerlo con la camiseta azulgrana, como hubiera sido su deseo, pero aquel partido se ha convertido con el paso del tiempo con el símbolo de una lucha de perseverancia para conseguir el reconocimiento que hoy en día tiene el Barça Femenino , uno de los seis equipos profesionales del club, que cada día gana más aficionados y despierta mayor interés mediático.

El once que jugó en el Estadio la Navidad del 1970 fue bautizado para la ocasión con el aséptico nombre de Selección Ciudad de Barcelona y llevaba camiseta blanca, pantalón azul y medias azulgrana. Su entrenador era el mítico portero Antonio Ramallets, todo una leyenda del Club, y el rival era la Unión Deportiva Centelles. En las gradas había unos 60.000 espectadores, ya que el debut de aquellas valientes mujeres que tuvo lugar la mañana del 25 de diciembre en el Camp Nou formaba parte de un festival benéfico organizado por Radio Nacional para recaudar fondos para los hospitales infantiles y que contaba como plato fuerte un partido internacional amistoso del primer equipo del Barça con el CSKA de Sofía.

Un anuncio en la revista

Pocos días después, un redactor de la Revista Barcelonista, enterado de todo, habló con Imma Cabecerán y la convenció de que la mejor manera para encontrar jugadoras de fútbol era poner un anuncio en su revista en busca de mujeres interesadas en practicar este deporte. Curiosamente, se volvía a repetir lo que había sucedido en 1899, cuando Gamper puso un anuncio para buscar compañeros para jugar al fútbol, ​​y así se originó el FC Barcelona.

La gacetilla fue publicada en la RB el 17 de noviembre. De este modo, Imma también logró formar la primera plantilla de la historia del fútbol femenino azulgrana, formada por un grupo de valientes pioneras de entre 18 y 26 años.

Después de un par de entrenamientos autogestionados y no demasiado afortunados, Imma y sus compañeras se dieron cuenta que necesitaban una pieza básica de todo equipo de fútbol como es el entrenador. Fue así como el FC Barcelona envió para hacer de técnicos de aquellas chicas inexpertas un dúo de categoría como eran las viejas glorias barcelonistas Antonio Ramallets y César Rodríguez.

César no tuvo paciencia con aquellas incipientes futbolistas y lo dejó correr al cabo de un par de días. En cambio, Ramallets, permanecería en el cargo de entrenador de aquellas chicas hasta 1972. El legendario Gato de Maracaná, plenamente consciente de que no podía hacer ningún milagro en tan pocas semanas de entrenamientos, se cargó de paciencia con el fin de enseñar a aquellas chicas aprendices de jugadoras los rudimentos más básicos de la técnica futbolística.

Aquel primer partido del Camp Nou de 1970 enfrentó las jugadoras reclutadas por Imma Cabecerán contra la Unió Esportiva Centelles, un equipo mucho más experimentado que lucía camiseta amarilla. Por su parte, las pioneras del Barça femenino suplían su evidente falta de técnica futbolística con una ilusión enorme. Desgraciadamente, aquel equipo de mujeres barcelonistas, que aún no estaba reconocido oficialmente por el Club, no pudo lucir los colores azulgrana ni utilizar el nombre de FC Barcelona.

El campo estaba reducido (72 x 40,3 metros), con cada una de las porterías (que eran más pequeñas que las reglamentarias) situada justo detrás de los semicírculos de las respectivas áreas. Además, la duración del encuentro fue limitada, con dos partes de sólo media hora, lo que enfadó mucho las jugadoras, ya que ellas se veían perfectamente capaces de aguantar los reglamentarios noventa minutos.

Las 17 pioneras

Contando también las que saldrían después desde el banquillo, estas fueron las 17 pioneras del fútbol femenino barcelonista: Maria Antònia Mínguez, Llera, Giménez, Pilar Gazulla, Lluïsa Vilaseca, Aurora Arnau, Anna Jaques, Maite Rodríguez, Immaculada Cabecerán, Núria Llansà, Alicia Estivill, Blanca Fernández, Lolita Ortiz, Consuelo Pérez, Carme Nieto, Fina Ros y Glòria Comas.

El partido fue muy disputado y terminó en empate sin goles, a pesar de las ocasiones de gol que tuvieron ambos conjuntos. Así las cosas, la conquista del trofeo en disputa se decidió mediante el lanzamiento de penaltis. Después de dos emocionantes tandas, la Selección Ciudad de Barcelona se acabó imponiendo por 4-3, con dos dianas de Imma Cabeza. Ese día se puso la primera piedra de lo que con el paso del tiempo sería el FC Barcelona femenino, a fin reconocido como sección oficial del Club en 2002 después de muchas heroicas vicisitudes.

El regreso en el Camp Nou

El partido de las pioneras fue el inicio de un proyecto de futuro que abrió la puerta a que el año siguiente, el 28 de marzo de 1971, el equipo femenino, que había pasado a llamarse Peña Femenina Barcelonista, disputara también en el Camp Nou la final de la Copa Pernod contra el Espanyol (1-2). Meses más tarde, 8 de diciembre de 1971, el conjunto barcelonista volver a medirse contra el Espanyol en el Estadio (2-2), como preliminar de un amistoso del equipo masculino contra el Vasas de Budapest con 40.000 espectadores en las gradas.

El próximo 6 de enero de 2021, el Camp Nou volverá a acoger un partido de fútbol femenino, 50 años después de que lo hicieran las pioneras del fútbol azulgrana, y lo hará con un enfrentamiento entre el Barça Femenino y el Español. Las jugadoras de Luis Cortés volverán a hacer historia, ya que saltarán al césped del Estadio por primera vez en un partido oficial y por primera vez desde su profesionalización, en 2015, resultado de la apuesta que hizo el Club 2015 para impulsar el fútbol femenino.